#QuédateEnCasa: La realidad de la mujer puertorriqueña después del COVID19

«La pandemia vino a llevarme a un mundo de silencio», así relata una víctima de violencia doméstica, sobre su situación con el encierro por el COVID-19.

Hojas escritas por pacientes que asisten a terapia grupal en la Fundación Alas a la Mujer en Utuado. | Foto: Glorilys Dávila Acevedo

Por: Glorilys Dávila Acevedo | glorilys.davila@upr.edu

El Poder Judicial de Puerto Rico, establece que la violencia de género “ocurre cuando una persona demuestra conductas que causan daño físico, sexual o psicológico a otra persona motivada por los estereotipos de género creados por la sociedad”. Además, añade que “estadísticamente, en la mayoría de estos casos las víctimas son mujeres en situaciones de violencia cometida por hombres. Ello incluye mujeres de diversas edades y trasfondos sociales, educativos y económicos. Sin embargo, cualquier persona podría verse afectada por la violencia de género”.

La violencia de género se puede manifestar de diferentes maneras, ya sea física, psicológica, sexual, económica, cultural o social y simbólica. También se puede presentar en diversos ambientes, desde el hogar (violencia doméstica), como en el ámbito laboral, social, familiar o hasta por las redes sociales. Un tema que ha trastocado la realidad de muchos hogares puertorriqueños a través de los años es la violencia doméstica.  

En 2017 se reportaron 8,227 incidentes de violencia doméstica, mas adelante en el 2021, 7,876 y hasta octubre del 2022 se han reportado 4,825. Gráfica por: Glorilys Dávila Acevedo

En cuanto a qué se debe esta alta incidencia de casos de violencia doméstica hacia la mujer, se podría identificar el pensamiento de una cultura machista.

La Jueza Superior del Tribunal de Primera Instancia y Administradora de la Región Judicial de Arecibo, Heidi Kiess Rivera, asegura que la manera en la que se erradica el pensamiento de que “me criaron pensando que yo soy hombre y ella es mujer y me tiene que respetar” es un “asunto muy individual” y que es una labor que requiere mucho esfuerzo y dedicación para educar y adiestrar a las personas. 

El Comité PARE busca establecer, impulsar y ejecutar programas de protección, prevención y orientación contra la violencia de género y establecer programas de atención a las víctimas.
«El Comité PARE busca establecer, impulsar y ejecutar programas de protección, prevención y orientación contra la violencia de género y establecer programas de atención a las víctimas.» | Foto: Portal Oficial del Gobierno de Puerto Rico

Tristemente, esta es la situación que aún en el siglo XXI viven muchas mujeres en el país, entre ellas una víctima, a quien por motivos de seguridad y para este reportaje, llamaremos Carmen. 

Carmen ha sufrido de violencia física y emocional por parte de su esposo por más de 40 añcs. Con dos hijos y nietos, se ha mantenido casada, a pesar de un intento de divorcio luego de una fuerte agresión física hace casi cinco años atrás. Decidió no proceder con el divorcio por la decadencia de salud que tenía su esposo y ella sentir el deber de cuidarlo a pesar de las agresiones.

Ya no recurre a la violencia física, pues no tiene fuerzas. Él me anuló como persona, me hirió con palabras y las palabras en la mente te siguen trabajando y te bajan la autoestima”.

«Carmen», víctima de violencia doméstica

Así describe el daño emocional causado por su esposo, quien, por enfisema pulmonar, depende de un tanque de oxígeno y ella tiene que ayudarlo en prácticamente todo. 

Cambios por la pandemia

«Después de la pandemia ha incrementado la violencia psicológica porque aunque él no salga, yo como su cuidadora, tenía que cuidarme para que a él no le diera COVID. Yo pensaba en cuidarlo a él, los nietos y lo último que pensaba fue en mí». 

«Carmen», víctima de violencia doméstica

También menciona que se atendían por medio de redes sociales, la página web o cualquier otro medio digital que facilitara la comunicación a la distancia. Adicional, creaban videos y contenido para las redes que ayudaba a orientar y crear conciencia a las personas de posibles patrones de violencia que podían estar saliendo a raíz del encierro.

Ally García, Coordinadora y Trabajadora Social de la Fundación Alas a la Mujer, lleva 5 años sirviendo como guía y ayuda a mujeres de Utuado, Jayuya, Adjuntas y Lares. | Foto: Glorilys Dávila Acevedo

García enfatizó en lo importante que fue para ellas el «tirarse a la calle» y hacer divulgaciones en las comunidades de sus servicios. Varios meses más tardes comenzaron a ver que las mujeres que estaban encerradas comenzaron a llegar.

Sobre los métodos que utilizó la Rama Judicial para atender estos casos, Kiess Rivera, pudo decir que «habían jueces que se las inventaban y hasta por WhatsApp hacían la vista para que la persona efectivamente reciba ese remedio”.

Estado de emergencia por violencia de género

Oficinas Centrales de la OPM localizadas en #161 Avenida Juan Ponce de León San Juan, 009​17 | Foto: Glorilys Dávila Acevedo

«Me diagnosticaron una condición en el seno, ahí sí que se me puso la vida difícil. No es tu pensar en la muerte, porque muchas veces yo la añoré. Yo decía: “Dios mío, aquí estoy». Esto te trastoca porque dices “¿viví para esto? ¿Para qué me trastoque un cáncer?” 

«Carmen», víctima de violencia doméstica

Trabajar el aspecto psicológico de una persona que se ha visto afectada por violencia emocional y se ha comprometida su salud mental y autoestima es una situación que puede resultar complicada. Sin embargo, existen ayudas ya sea de psicólogos, trabajadores sociales o consejeros que pueden servir de guía para que la persona desarrolle confianza en sí mismo.

Oficinas de Utuado de la Fundación Alas a la Mujer. Ubicados en Dr. Cueto #92 Utuado, Puerto Rico 00641 | Foto: Glorilys Dávila Acevedo

“Creo que todos estamos de acuerdo en que no podemos descansar. Que hay que continuar laborando arduamente, diariamente, en este proceso de educación y ayuda a las víctimas.” 

Heidi Kiess Rivera, Jueza Superior del Tribunal de Primera Instancia y Administradora de la Región Judicial de Arecibo

Kiess Rivera enfatiza en que esta iniciativa ha ayudado a hacer visible la situación y que ha servido para que las organizaciones como el Observatorio de Equidad de Género, que luchan por los derechos de las mujeres y partes más vulnerables, exijan en manera de avisarnos. Destaca que «es una manera de alertarnos de que todavía faltan cosas que tenemos que atender».

Carmen, quien recurrió a ayuda legal en un momento en su matrimonio y luego se retractó, invita a que las mujeres que han podido notar un patrón de violencia en su hogar, que se orienten sobre la ayuda que pueden recibir y les exhorta que salgan de esa situación. Aunque menciona que en ella no existe el “ay ella pudo y a mí nadie me lo dijo”, espera que su testimonio pueda servir de ayuda para otras mujeres salir a una mejor situación.

«Ha sido un camino muy arduo y lastimoso para mí, que yo quisiera que en la medida que pueda, ayudar a los demás. Si estás en tiempo de salir de esa relación, huye porque te vas a ver reflejada en mí. Estoy feliz que mi testimonio sirva para otras personas y que puedan encontrar un mejor por venir»

«Carmen», víctima de violencia doméstica.

¿Cómo puedo buscar ayuda?

Kiess Rivera hace un llamado a todas las personas, específicamente quienes hayan notado patrones de violencia, a solicitar ayuda. En caso de no tener ningún peligro eminente, llame a las líneas de ayuda u orientación. Si se encuentra en peligro eminente, diríjase al cuartel más cercano o llame al 9-1-1. No es tarde para buscar una mejor calidad de vida.

12 respuestas a “#QuédateEnCasa: La realidad de la mujer puertorriqueña después del COVID19”

  1. […] aquí al reportaje: #QuédateEnCasa: La realidad de la mujer puertorriqueña después del COVID […]

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  3. La Educaciòn comienza en casa, eduquemos a nuestros hijos a vivir en armonía, a ser tolerantes hombres y mujeres, solo así podremos obtener mejores resultados.
    Excelente reportaje!

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  4. ¡Me parece un excelente reportaje! Mucho que aprender de esto.

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  5. Te felicito por tu excelente reportaje es nuestra triste realidad la que vivimos en nuestro país pero urge buscar ayuda y cambiar nuestra manera de pensar. No solo las matan matan su autoestima, el orgullo y dignidad. Acudan a las Agencias o Entidades que están para ayudarles. Seamos empaticos y brindemos apoyo al que lo necesita .

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  6. Avatar de Felicity S. Trinidad Garcia
    Felicity S. Trinidad Garcia

    La historia de Carmen es bien impactante, excelente reportaje.

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  7. Excelente reportaje, bien estructurado!

    El Poder Judicial tiene en varias Regiones Judiciales las Salas Especializadas en Violencia de Género (SEVG). A través de la SEVG las víctimas reciben orientación y apoyo en todo el proceso, inclusive, coordinan el servicio para que tengan representación legal. Además, ayudan en la rehubicación, de ser necesario.

    El ciclo puede romperse….

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  8. Excelente reportaje! Lleno de valiosa información. Para que el desconocimiento, no sea un contribuidor a la falta de atención y acción ante la realidad de la violencia de género.

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  9. Que mucho nos falta aún! Excelente reportaje que pone la vista en la vida en las cuatro paredes de alguien enfrentando la triste situación de violencia sicologica. Mucho ánimo para que más mujeres recurran a buscar ayuda.

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  10. Excelente reportaje y una lamentable realidad. No es facil para muchas mujeres poner un pare ya que se sienten menos que sus parejas pero todo lo contrario. Fuerzas a esas víctimas y pidan ayuda para que esto termine y sigan hacia adelante.

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  11. Muy buen trabajo, espectacular y muy profesional, felicitaciones.

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